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lunes, 8 de octubre de 2012

KUK SOOL Eung Koo Lee

Maestro 총관장님 Eung Koo Lee, Uno de los primeros maestro en llevar y transmitir el Kuk Sool al  país de Venezuela, es uno de los pocos maestros en el mundo que intenta preservar el Arte Marcial Tradicional Coreano hasta nuestros días.






ARTE MARCIAL DE TEMPLO





Cuando hablamos  de la palabras “Templo Shaolin” lo que inmediatamente viene a la mente son los orígenes antiguos del Kung-fu, experimentados maestros budistas que entrenan a jóvenes guerreros que luego de años de práctica realizando interminables repeticiones de movimientos básicos, ejecutando técnicas con precisión, desafiando incluso los más severos extremos del clima, los transforman en expertos en las artes de lucha.

HISTORIA

El budismo llegó a China desde la India en el siglo IV. Poco después, los monjes chinos  difunden su ideología  a través de la península coreana, y con ello también traen sus artes marciales.

Este arte aun existen en muy pocos templos budistas aislados en Corea, una forma rara, un arte casi desconocido, el cual es un descendiente directo de lo que se enseñaba a los monjes chinos en la antigüedad

El nombre del estilo es bulmudo, “bul” significa Buda, budista “mu” significa marcial o militar y “do” arte o enseñanza, uno puede leer los caracteres chinos y coreanos y el resultado será siempre el mismo: artes marciales budistas

  Chung Ahn Nyun
Uno de los pocos sitios de entrenamiento de hoy en día de bulmudo, se encuentra en la parte sur de Corea. Se llama Nyun Chung Ahm, o Templo del Loto Azul. Se trata de un pequeño grupo de edificios que pertenecen al monasterio Bomo-Sa, que data de 678 AD. 
Al mismo tiempo, se informó de que los varios miles de monjes que vivían aquí fueron capaces y decisivos para repeler una invasión japonesa. A pesar de ello, Bomo-Sa fue quemada hasta los cimientos por una fuerza japonesa en una fecha posterior. La versión actual fue reconstruida en 1613.

Para llegar aquí, se debe realizar una caminata hasta una pista forestal muy gastada, durante unos 20 minutos, después de pasar el complejo del templo principal. Y allí, entre los árboles y montañas que ocultan, se encuentra una sala de entrenamiento sorprendentemente moderno construido de piedra y hormigón.

Estatua del Guardia sobrenatural del templo en pose
 marcial.
Una rápida inspección de los locales revela lo que normalmente se espera de un templo. Los monjes, vestidos con sus trajes gris característico, realizan tareas domésticas como el lavado de los uniformes, los cuidados de pequeños huertos y la reparación de los edificios caídos. La apariencia es tan tranquila y serena que uno nunca se imaginaría que son  expertos en las artes marciales.

Los siguientes datos sobre bulmudo  fueron descubiertos en una discusión con el actual maestro e instructor jefe de Chung Ahm Nyun. Su nombre no será revelado de acuerdo con su solicitud específica. También debe tenerse en cuenta que este maestro era extremadamente reacio a proporcionar información acerca de lo que siempre ha sido un arte más bien discreto. Sin embargo, él tuvo la amabilidad de explicar algunos de los preceptos rectores y permitir varias observaciones de la clase.

LOS MONJES MARCIALES

Monje del templo Chung Ahn Nyun, en una
exhibiciòn de Kuk Sool
Los orígenes exactos del bul mu do son difíciles de determinar. Desde que el hombre siempre ha tenido que defenderse de los animales salvajes y de  otros hombres, las artes marciales se han ido desarrollado durante un largo período de tiempo.

Su introducción en Corea probablemente ocurrió durante el período de los Tres Reinos (comenzando en el año 372 DC) de la historia de Corea.

 Ha sido cuidadosamente custodiado y enseñado en secreto dentro de la comunidad budista desde entonces.

Una pregunta natural es: ¿Por qué los monjes budistas, que se dedican al desarrollo espiritual, la paz se someten a entrenamiento en artes marciales? Todo el mundo ha visto en un momento u otro las películas de kung fu en la que los monjes defienden su templo sin miedo contra los caudillos y ejércitos invasores. Pero todo el mundo sabe también que es poco probable que eso suceda hoy día. ¿Por qué entonces estudian artes marciales?

Guardián protector sobrenatural, que protege
 la entrada al  templo Chung Ahn Nyun
 en Corea del Sur
 Más importante que, por razones de defensa propia, es porque creen en la correlación entre el cuerpo y la mente. Ellos desean desarrollar su paciencia, resistencia y autocontrol. Ellos creen que es más fácil ser misericordioso cuando uno es fuerte. Y están seguros de que estas cualidades se pueden realizar a través de la formación de su ser físico

La práctica de bulmudo requiere una extremada dedicación y perseverancia. Los monjes budistas son ideales para el estudio de este arte, aparte de dedicar su vida a su religión, tienen la opción de estudiar bulmudo, es decir no todos los monjes practican este arte, y el éxito o fracaso de su entrenamiento no afecta su futuro en el templo.

La tasa de deserción después de la primera semana de estudio se sitúa en un sorprendente 90 por ciento, comenta un monje de alto rango.

FORMACIÓN

Desde ese primer encuentro, el Sunim (monje instructor) siempre hizo hincapié en un punto clave de bulmudo: “ el equilibrio”. Una analogía se hizo con un perro al orinar. Se necesita mucho tiempo para que un perro aprenda a posarse en forma estable en tres patas, la capacidad no es algo natural. Los seres humanos se encuentran en una situación similar con las artes marciales, meses y meses de práctica se requieren para que el estudiante pueda dominar el equilibrio sobre una pierna, pero es esencial para hacer cualquier progreso. Es literalmente, la base de todo lo demás, y todos los estudiantes deben comenzar aquí.

La formación se realiza seis días a la semana, con la excepción de domingo.
Utilizan el suelo, la pared, bolsas pesadas e incluso un juego de anillos gimnásticos suspendidos del techo. Este entrenamiento es lo suficientemente vigoroso como para producir  gotas de sudor  incluso con el aire más fresco por la mañana en la que la temperatura puede llegar hasta 10 grados  bajo cero, y todo esto siempre sin calefacción. 

Algunos estudiantes quitan sus camisetas, pero todos llevan los pantalones anchos y grises característicos de los monjes coreanos y no utilizan ningún cinturón o cualquier otra indicación de su rango.

TÉCNICAS


En bulmudo se incluye un número de “formas”(Jion) . Ciertos movimientos se asemejan a la mantis religiosa y la grulla del estilo kung-fu, y se llevan a cabo a un ritmo algo más lento de lo normal que las formas (Jion) coreanas y japonesas. Otra diferencia notable es la forma de los brazos permanecen extendidos para la mayoría de los movimientos, por lo general con las manos abiertas y en movimiento en forma circular. El número exacto de los movimientos en una forma (Jion)  no fue determinado, pero había sin duda más que en la mayoría de los otros estilos.

Cabe señalar que el monje jefe insistió con vehemencia que el dominio completo de una sola forma, con todas sus complejidades y secretos, daría lugar a ser capaz de derrotar a casi cualquier adversario.

Durante los entrenamientos no se emplean ningún tipo de equipo de protección. Se afirma que el uso sería antinatural y podría producir una falsa sensación de seguridad.
Una diferencia notable, el entrenamiento de armas, no había espadas, ni bastones de maderas, es decir de hecho ningún tipo de armas se asocian con bulmudo.

TRADICIÓN

El paso de los siglos parece haber cambiado sólo los aspectos superficiales de las artes marciales coreanas del templo. La sala de entrenamiento está ahora equipada con pared de espuma  y patas de apoyo, así como la iluminación eléctrica. Y cerca se pueden encontrar algunas piezas de moderno equipo de entrenamiento con pesas, pero el espíritu marcial sigue siendo el mismo. Los monjes tienen, exclusivamente para ellos, una manera extremadamente eficaz y de alto nivel de arte de defensa, afinado hasta la perfección desde hace mucho tiempo.

A diferencia de Shaolin kung fu, Bulmudo ha sido mantenido en forma discreta, los maestros de bulmudo, a pesar de sus habilidades excepcionales, han mantenido siempre un perfil bajo. Y así sigue siendo.

Fuente.
Story and Photos by Robert W. Young
Korean Martial Arts Resource

jueves, 27 de septiembre de 2012

Escritos del Maestro Lee Han Chul


LO RELATIVO DE LA NATURALEZA

Existe lo bello porque existe lo feo.
Existe lo bueno porque existe lo malo.
Por lo tanto;

Lo real y lo fictício se complementan,
Lo difícil y lo fácil coexisten,
Lo alto y lo bajo contrastan.

El silencio está en armonía con el ruído.
La anterioridad y la posterioridad están unidas.

Por eso los sabios tratan con virtud todas las cosas pacíficamente y lo llevan a la práctica. Aunque son sabedores de todo lo creado, no son arrogantes ni ávaros a pesar de que pueden tener más.

Aunque trabajan con diligencia, no esperan recompensa. Aunque tuvieron mucho éxito, no se comportan con soberbia.
Estas virtudes siempre acompañan a los sabios

Maestro Lee Han Chul.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Entrevistas al Maestro Lee Han Chul


Entrevistas realizadas por prensa escrita de Paraguay al Maestro Lee.




Titulos y Reconocimientos

Titulo otorgado al Maestro Lee Han Chul en el año 1973, por el Gran Monje Zen
 Dr. Kyung Bo Seo.





Algunos de los Reconocimientos entregados 
al Maestro Lee Han Chul.




















Escudo de la Escuela de Kung-Fu Kuk Sool Won (휘장)


Maestro Lee Han Chul 총관장님 이한철

Maestro Dr. Lee Han Chul 총관장님 이한철


Fundador de la escuela de  Kuk Sool , en la cuidad de Asunción Paraguay, precursor en la difusión del Arte y Tradición Coreana en Sudamérica.





Nació en el año 1940 en la cuidad de Gangneung, provincia de Gangwon, Corea del Sur.
Desde muy pequeño se inicio en las practicas de artes marciales como era costumbre de la época, a los 13 años de edad es llevado a un templo budista por su abuelo, para aprender artes marciales, filosofía y medicina, convirtiéndose  en un  monje budista recibe enseñanza de grandes monjes de la época, entre ellos el Gran Monje Zen Dr. Kyung Bo Seo y Gran Monje Zen Cheongdam Sunim.

Continuando con su vida marcial recibió enseñanzas del Gran Maestro Choi-Yong Sool creador del Yu Sool, que tiempo más tarde fue llamado Hapkido.

En 1962 Visita la escuela Shin Moo Whan y realiza demostraciones de Piong-Soo
En 1963 establece su dojang Suh Dae Moon en Seúl, Corea.

En 1968  funda y asume el cargo del Presidente de la KOREA BULMOODO ASSOCIATION con el Gran Monje Zen Dr. Kyung Bo Seo y con el apoyo de los Grandes Monjes Budistas en el Templo “Choguesa” del Orden Budista Central de Chogue en Seúl, Corea.

En el año 1972 con el fin de trasmitir y dar a conocer la cultura milenaria de su país, se dirige a Sudamérica, y luego de viajar por varios países decide establecerse en el Paraguay en donde abre su primer dojang y un consultorio de Medicina oriental en dicho país, y da origen a la THE KOREA  KUK SOOL WON ASSOCIATION.

En el año 1973 recibe el titulo de 9º Grado, del Gran Monge Zen Dr. Kyung Bo Seo, presidente de la INTERNATIONAL KONG SHIN-DO FEDERATION, siendo el segundo maestro en ostentar dicha categoría en el mundo, en dicha disciplina.

En 1981 Funda el primer templo Budista Coreano de Latinoamérica  en Paraguay llamado DALMASA (Templo “Bodhidharma”)


En el año 1999 fallece en el Paraguay.
Luego de su fallecimiento, sus alumnos de primera generación más antiguos continuaron con las enseñanzas legadas por el Gran Maestro Lee.

En la actualidad el KJN Eung Koo Lee continúa dirigiendo la escuela del venerable Maestro Lee Han Chul.